Explicaremos aquí estas tres palabras que tanto nos marean y confunden porque suenan igual, pero se escriben de forma diferente ya que indican cosas diferentes. Me refiero a Ay, hay y ahí.
La primera es muy fácil: Ay es una interjección, es decir, una exclamación que nos indica un quejido, un lamento o un suspiro, y suele ir acompañada de los signos de admiración, aunque no necesariamente. Es la única que se escribe sin h y por tanto, la que menos nos va a marear. Por ejemplo:
¡Ay, cuánto sufrimiento!
¡Ay, qué dolor!
Ay, a veces pienso que no me escuchas.
Y el plural de Ay, es: Ayes.
Durante el velatorio, solo se escuchaban ayes de dolor…
La segunda, es hay. Esta se escribe igual que la anterior, pero con h delante, ya que pertenece al verbo haber, concretamente al modo impersonal del presente indicativo. Nos indica que algo es, está o existe.
Hay algo que no entiendo.
Aquí no hay luz.
¿Quién hay en la casa?
Y la tercera, ahí, es la única que lleva la i latina (acentuada), además de h intercalada. Esta es un adverbio de lugar. Los adverbios de lugar son fáciles de identificar, porque responden a la pregunta «dónde?».
Ahí queda bien el jarrón.
Creo que lo dejé ahí encima.
Ahí fuera hace mucho frío.
Resumiendo:
Ay, para las exclamaciones.
Hay, para expresar que algo es, está o existe.
Ahí, para indicar un sitio o lugar.
